En este nuevo año que empieza me he propuesto cumplir todos mis sueños. No importa si en otras ocasiones se trató de propósitos perdidos, puesto que esta vez sí voy a conseguirlo. Lucha por aquello que quieres, porque cada día se nos brinda una nueva oportunidad de demostrar cuánto valemos.
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Un amigo me traicionó, la pareja no me aportó lo que esperaba de ella. Los estudios se me hicieron cuesta arriba y el trabajo en la empresa se complicó.
Disfruta de este nuevo año que llega, ¡las cosas solo pueden ir a mejor!
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Este nuevo año nos cogerá con los bolsillos vacíos, pero de salud y amor estamos que rebosamos.
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Si crees que los propósitos de año nuevo de siempre están muy manidos, prueba a modernizarlos. ¿Qué te parece fijarte como objetivo el tener un par de calcetines nuevos, comer tantos dulces como pueda tu estómago y reunir a la familia al completo? Así, ¡seguro que tus propósitos no van a pasar de la comida de reyes sin haberse cumplido!
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Este año vas a ser más feliz que nunca, ¡me tienes a mí para asegurarme de que eso se cumpla!
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Si alguien te dice que no puedes cumplir tus propósitos de año nuevo, tú respóndele que tu principal propósito era a verle de nuevo.
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Que la llegada de un nuevo año no te amedrante, el camino es mucho más llano de lo que se muestra de forma aparente. ¡Y tú eres un gran caminante!
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Un nuevo año puede significar lo que tú quieras. Puede significar nuevas promesas, nuevas metas y amistades nuevas. Pero, por qué no, ¡también puedes hacer que signifique una forma de continuar con la buena racha que ya llevas!
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El niño Jesús, Don José y la virgen María, yo para este nuevo año los mejores sucesos te desearía.
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Dicen que Papá Noel baja por una chimenea y que los renos de los Reyes Magos vienen volando. Ante esto, yo solo puedo decirte que te mando toda mi magia para que sigas mejorando.
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Con el fin de la Navidad, quizá desaparezcan las luces de las calles. Sin embargo, la luz que nos mueve está en el interior de los corazones.